martes, 7 de agosto de 2012


CONSECUENCIAS EN LA SALUD FÍSICA Y PSÍQUICA DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER EN LA PAREJA.
1. DATOS EPIDEMIOLÓGICOS
La mayor parte de la violencia sufrida por mujeres y niñas procede de hombres a los que conocen y a menudo es ejercida en el seno de la familia y el hogar. Esta violencia puede tener dimensiones físicas, sexuales o psicológicas, puede prolongarse durante años y puede aumentar en intensidad con el tiempo. Muchas veces, las lesiones físicas no son los resultados más importantes.
La mejor forma de conceptualizar la violencia contra la mujer es definirla como un factor de riesgo para una mala salud, ya que sus consecuencias se traducen en una amplia gama de efectos en la salud de la mujer.
La magnitud del impacto que el maltrato contra la mujer en la pareja puede tener en la salud física de la víctima ha sido puesta de manifiesto en numerosos trabajos. Se ha mostrado que las mujeres que sufren violencia física y/o sexual por parte de su pareja pueden llegar a padecer un 60% más de enfermedades de carácter físico que aquéllas que no son víctimas de tal violencia.
Las lesiones, el miedo y el estrés asociados al maltrato pueden conllevar problemas de salud crónicos. Estos problemas pueden ser:
·         Dolores musculoesqueléticos,
·         Dolor crónico de cuello o espalda,
·         Artritis,
·         Complicaciones cardiovasculares,
·         Infarto de miocardio,
·         La angina de pecho,
·         Síntomas neurológicos recurrentes, como:
·          
Ø  Balbuceo,
Ø  Tartamudeo incipientes,
Ø  Pérdida de audición,
Problemas de vista,
Ø  Dolores de cabeza y migrañas.
·          
·         También se han descrito enfermedades crónicas como dolor crónico, síndrome del intestino irritable, trastornos gastrointestinales, quejas somáticas y fibromialgia.
La salud sexual y reproductiva ha sido, sin duda, la condición física más ampliamente abordada en el estudio de la salud de la mujer maltratada. Por una parte, el maltrato se ha asociado a conductas sexuales de alto riesgo para el contagio de las enfermedades de transmisión sexual (ETS) y el VIH/SIDA. Además, el maltrato en la relación de pareja puede interferir en la negociación y la decisión sobre la contracepción y el uso de condones, como muestra la asociación encontrada entre la violencia doméstica y los embarazos no deseados y abortos voluntarios.


En un pasado no muy lejano, se ha postulado que ciertas características personales de las víctimas de violencia doméstica podrían ser la causa del maltrato. Por ejemplo, algunas corrientes han recurrido a características de masoquismo o a patologías como la histeria o el trastorno de personalidad dependiente, para explicar por qué algunas mujeres permanecen o regresan a una relación de abusos.
En la actualidad existe, afortunadamente, suficiente documentación que demuestra que no existen características psíquicas diferentes entre las mujeres maltratadas y no maltratadas previamente al inicio del maltrato. Por el contrario, es el maltrato contra la mujer en la pareja él que conlleva una serie de trastornos y problemas de carácter psicológico que no deben ser ignorados, como:
·         Ansiedad,
·         Insomnio,
·         Baja autoestima,
·         Depresión clínica ,
·         Trastorno por estrés postraumático,
·         Ideación suicida (o intento de suicidio),
·         Consumo y abuso de determinadas sustancias (como alcohol, drogas y determinados psicofármacos),
·         Morbilidad psíquica


**CONSECUENCIAS EN LA SALUD FÍSICA Y PSÍQUICA DE LA VIOLENCIA CONTRA LA MUJER EN LA PAREJA. DATOS EPIDEMIOLÓGICOS. Isabel Ruiz Pérez


¿Por qué se aísla la mujer maltratada?
La mujer maltratada se aísla, no sólo de amigos y conocidos, sino incluso de su familia.
Muchas veces lo percibimos como que es una ingrata, desagradecida, e incluso orgullosa, puesto que ya no nos busca como antes. El problema es que no comprendemos realmente a la mujer maltratada, no llegamos al fondo de todas las cosas, e ignoramos (o pretendemos ignorar) que ella sufre maltrato (sea físico o verbal). El maltrato se esconde de mil maneras…

Muchas mujeres aun hoy, en pleno siglo XXI, viven en cautiverio, sin que lo notemos. Ni nos damos cuenta porque su cárcel ha sido astutamente construida por el déspota de su esposo, le ha encarcelado sus sentimientos, su autoestima, su fe en si misma y muchas veces, hasta su deseo de vivir.
Pero vive, se aferra a la esperanza de que su maltratador un día cambie, aunque muy en el fondo sabe que eso no pasará. Mientras tanto se resigna, añorando los recuerdos de tiempos pasados en los que podía llamar y hablar con el mundo exterior sin que nadie le controlase con quien, qué y cuándo. Cuando te encuentras con la mujer maltratada, ella te regala un tímido saludo, un saludo lleno de temor, mientras te dice que todo está bien. No te puede decir la verdad, no se atreve, porque aunque su carcelero no esté presente en ese momento, está presente en su vida, en todo lo que hace, y siente sus cadenas aun cuando no está presente. Su carcelero sabe controlarla, incluso cuando no está con ella.
La mujer maltratada quiere, desea, y necesita la comunicación con su familia y amistades. Pero él, su maltratador, quien al principio es sutil y grosero más tarde, se ha encargado de retirarle a sus amigas, siempre tiene algo que criticar de sus amistades, de su familia… y cada vez aleja más a la mujer de toda persona que pudiera hacerle bien. La situación es tan difícil para la mujer maltratada que Dios le ayude si intenta la comunicación a espaldas del cobarde que la hace temblar, porque si la descubre “desobedeciendo su órdenes” le espera una gran gama de insultos, humillaciones, y hasta golpes por atreverse a intentar tener una amiga, o compartir algo con una vieja amistad, de las pocas que le quedan a la mujer maltratada, porque la mujer maltratada siempre acaba  aislada.
El maltratador no conoce límites, y ella no sabe ponerlos. La palabra “basta” no figura en su vocabulario, le han quitado alevosamente el derecho de hablar, de pedir, de exigir, y ni tan siquiera tiene libertad para dialogar. Calladamente se somete a todo lo que él diga. La mujer maltratada sabe que necesita ayuda, pero no puede pedir ayuda. Él la manipula para que quede entre sus redes, “nadie te va a creer”, “tienes que hacer lo que yo diga porque si te dejo nadie más se fijará en ti”, “si me das problemas vas a sufrir”, “tu familia sufrirá mucho si me das guerra, te arrepentirás toda la vida”, “nadie más te querrá, estás fea y gorda…”
El maltratador no conoce limites,  y ella no sabe ponerlos, la palabra “basta” no figura en su vocabulario, le han quitado alevosamente el derecho de hablar, de pedir, de exigir, ni tan siquiera tiene la libertad de dialogar y se somete calladamente a todo lo que el diga, la mujer sabe que necesita pero no puede pedir ayuda, “quien te va a creer si yo te lo doy todo” “tienes que hacer lo que yo diga, porque si te dejo nadie mas se fijara en ti”, “si te vas no podrás vivir sin mi, nadie te querrá, estas fea y gorda”.
Uno de los factores más dañinos es el miedo a empezar de nuevo. ¿Cómo, y con qué va a empezar? Si el maltratador le ha quitado todo, los hijos visten, comen, y van a la escuela con lo que él paga…  Ella no tiene dinero porque él se encargó desde un principio en hacerle creer y demostrarle que no necesitaba trabajar. Se encargó de que no pudiese ser independiente, y muy por el contrario, que siempre dependiese de él.
“No tienes necesidad de trabajar, porque para eso estoy yo” y así es, ante los ojos de todos, es el mejor proveedor, es amoroso y dedicado a su familia, ¿pero quien recuerda que ella puso su amor, su vida y su patrimonio en las manos de su esposo? Quien más debía recordarlo es él, y lo ha olvidado, o pretende olvidarlo. ¿Y qué más da, si después de todo lo material no tiene la mayor importancia? Ella soñó con el amor, la unión, el respeto mutuo… y no lo tiene.
¿Por qué nos alejamos de la mujer maltratada? ¿Por qué permitimos que la alejen de nosotros? ¿Por qué permitimos que ella se aleje? ¿Por qué no tratamos  e insistimos en ayudar?
Como familiares y como amigos, pensamos erróneamente que si ella así es feliz. Y si ella está feliz con su situación, no hay motivo para intervenir. Damos por sentado  que “eso es lo que ella escogió” que si no fuera feliz ya lo habría dejado, damos por sentado que las excusas que ella utiliza son ciertas, le creemos que “ese ojo morado fue un accidente” esos raspones en las piernas fueron por una “caída” después de todo, son las físicas las que podemos ver , son las físicas las que se pueden disimular… ¿Pero y las heridas emocionales? Esas heridas que no se ven pero que hacen más daño porque son dichas a cada momento, cada día y todos los días, por su esposo, el hombre que la ama, el buen proveedor, el buen padre y amigo, el profesional que sale todos los días a la oficina, clínica, o bufete de abogados a brindar la mejor de su sonrisas, la mejor de sus actuaciones, a lo mejor defendiendo a alguna mujer victima de maltrato.
¿Qué podemos hacer?
En nuestro papel de familia, amigos o conocidas de una mujer maltratada, debemos poner atención a las primeras señales de abuso,hablar con el maltratador, hacerle ver su error, buscar ayuda profesional, creo que como familiares y amigos jugamos un rol importante para hacer que el abuso y el maltrato paren, hablemos con la mujer abusada, hagámosle ver que no es normal ni lógico sufrir a manos de un déspota, dictador y machista.

 


8 cosas que no puedes esperar de una mujer maltratada:

La verdad está en esos puntos, cuando sientas que tu amiga “la maltratada se alejó de tu vida y creas que es malagradecida al no valorar tu amistad, quizás después de leer este articulo, la comprenderás…
La mujer maltratada usa muchas máscaras para no ser descubierta.
Si tienes una amiga así, tenle paciencia y sigue a su lado. Seguro que siempre te está recordando y esperando que la entiendas, no la abandones, ella necesita de todas sus amigas…

1. No esperes que te llame cada día, ni cada semana, ni nunca… aunque prometa hacerlo.
La mujer maltratada no podrá llamarte, su maltratador la vigila y está atento a cada llamada de teléfono, escuchando y controlando. Aún cuando éste no esté, ella no tendrá libertad de llamarte pues se sentirá humillada y temerá complicar más las cosas, tanto para ella como para ti.
2. No esperes que te conteste a todas tus llamadas… no puede.
Y cuando contesta no es con libertad, cuando te dice “estoy bien” no te dice la verdad, nunca está bien. Cuando tenga voz ilusionada y feliz recuerda que sólo es una tapadera, no es libre. Cuando te hable susurrando por miedo a ser escuchada y no consiga hablarte más de dos minutos
 (tal vez mientras su maltratador está aseándose)no te desesperes, simplemente no tiene otro remedio, bastante hace y arriesga ya con dedicarte esos segundos y esas pocas palabras.
3. No esperes que la mujer maltratada salga a hacer amistades… o a pasar tiempo contigo.
No puede, seguramente lo intentó muchas veces, pero no puede. No puede porque su maltratador le aísla, criticará cualquier detalle de todas y cada una de sus amistades, le seguirá por la calle, a veces incluso a escondidas para misteriosamente encontrarse con ella cuando más libre se siente y así sin palabras recordarle “tenga cuidado, yo estoy aquí y en todos lados”. Uno de los mayores fuertes del maltratador es su poder para aislar, para convertirse en el ser omnipresente sin el cual nunca pueda salir a ningún lado, con el que siempre deberá contar y buscar agradar.
4. No esperes que la mujer maltratada muestre interés en pasar tiempo contigo.
Ni debes sentirte herida si crees que ha perdido interés en ti porque no es cierto. Simplemente ocurre que ahora mismo le supondría un confrontamiento. Debes insistir, si hoy no contestó tu llamada, ni esta semana, ni este último mes… insiste. Ella quiere contar contigo especialmente si te ha confesado su situación. Cuando se esconda de ti se paciente, recuérdele todas las semanas que estás ahí para ella y perdona las veces que aparenta no apreciar tu amistad. Ante su maltratador debe dar la imagen de no tener interés en tu amistad. Es una mujer sin libertad, no puede decirte “ven a tomar un café”. Técnicamente claro que puede hacerlo, pero sólo técnicamente puesto que la realidad es que ella no vive la realidad que tú conoces o que ella misma a veces cree tener.
5. No esperes que le ponga límites a su maltratador.
No puede, por la propia esencia de su relación es ella la que tiene los límites, ella no puede decir “ya basta“, “fuera de casa“, si quieres esto tendrás que ayudarme“. No es lógico, ella no está en posición de dialogar, ni mucho menos de exigir, sólo está en posición de someterse. Es una mujer maltratada.
6. No esperes que la mujer maltratada pida ayuda.
¿A quién va a pedirlo? Primeramente lo pedirá a su familia y si éstos no reaccionan y no le creen, ¿a quién pedirá ayuda? Si su familia le niega ayuda no tendrá a nadie a quien recurrir pues la mujer maltratada es una mujer aislada, se siente avergonzada, incomprensiblemente culpable, y humillada por todos cuanto le negaron su ayuda. ¿A quién acudirá? Seamos realistas, no puede acudir a nadie y si puede será demasiado grande su sentimiento de honor y humillación como para poder hacerlo.
7. No esperes que sea dueña de lo suyo, ni aún de aquello que le regalas.
La mujer maltratada no es dueña de nada, sólo puede serlo en papel, en la teoría… pero no en la práctica. Puede tener muy presente que ella es la que ha comprado la casa, el coche, la televisión, la revista, o lo que sea… puede decirte “es mío, no es suyo”. Y es cierto… pero sólo en teoría, reclamar lo suyo sólo supondría mayores problemas para ella. Si le regalas algo asume que será de su maltratador, y con suerte lo compartirá un poco con ella.
8. No esperes que sea feliz cuando esté libre de su maltratador por unos días.
Serán sus mejores días en mucho tiempo, lo disfrutará y deseará que nunca acabe… pero su felicidad no es completa pues sabe que los días pasan y pronto volverá a estar con su maltratador. Incluso durante su descanso ella estará pendiente de sus mensajes y llamadas, sintiéndose culpable por cualquier cosa que él le diga estar sufriendo a su causa.

Sintomas del maltrato
¿Qué es el abuso psicológico emocional? ¿Con qué frecuencia ocurre? ¿Cómo identificarlo? ¿Cómo enfrentarlo? ¿Cómo saber si necesito ayuda?
¿Cómo saber si una mujer está siendo maltratada? ¿Cómo actúan los maltratadores? ¿Cómo logran salirse con la suya? ¿Cómo logra el abusador controlar a la mujer?
El maltratador suele dirigir todas las discusiones de tal modo que no tengas tiempo de pensar si su comportamiento es correcto o no, o si lo que dice es cierto, o no.
Dedica un tiempo para hacerte las siguientes preguntas. Puede que tu compañero/pareja actúe como si éstas cosas están bien pese a que obviamente no lo están:

¿Sientes que es imposible dialogar con tu pareja acerca de lo que te molesta?
¿Te critica, humilla, y destruye tu autoestima con frecuencia?
¿Te ridiculiza cuando te expresas?
¿Te aisla de los amigos, familia, y grupos?
¿Te limita el acceso al trabajo, dinero, o recursos materiales?
¿Te ha robado? ¿O se ha endeudando dejándote a ti la responsabilidad de cubrirlas?
¿Sientes que tu relación con él tiene muchas subidas y bajadas entre sentirle como alguien muy cercano y muy lejano?
¿Te has sentido alguna vez obligada a tener sexo, sólo por evitar discutir por ello?
¿En ocasiones te sientes atrapada en la relación?
¿Alguna vez ha tirado tus pertenencias, destruido objetos, o amenazado a tus mascotas?
¿En ocasiones sientes miedo de tu pareja?
Si has dicho sí a varias de estas preguntas es para preocuparse, son los síntomas del maltrato emocional.
Un aspecto principal del abuso emocional es que el abusador lava el cerebro de la víctima:
¿Con qué frecuencia ocurre?
(Control mental)
·         El maltratador se asegura que la víctima no sepa lo que ocurre y qué cambios están tomando lugar.
Puede controlar tu economía, hacer planes para ti, o no contarte sus planes hasta el último minuto. Puede que hable con otros a tus espaldas, para intentar aislarte de ellos.
·         El maltratador controla todo el tiempo a la víctima, así como todos sus espacios físicos mientras trabaja para suprimir el antiguo comportamiento de la víctima. La víctima es lentamente, o rápidamente, precipitadamente aislada de todas las personas menos del maltratador.
Puede que tu pareja insistiese en que dejes cierto grupo social, la iglesia, aficiones, o actividades de trabajo. Puede que te trasladase a otro lugar, lejos de la familia y amigos, que haga imposible que te comuniques con ellos incluso por teléfono, y te solicitase dejar de contactarte con personas específicas que valora como posibles puntos de apoyo para ti.
·         El maltratador produce en la víctima una sensación deindefensión, miedo y dependencia.
·         El abuso verbal y emocional crean estas emociones, y crecen con el tiempo.
·         El maltratador trabaja para inducirte a nuevos comportamientos y actitudes ante la víctima.
·         Te entrena para que te comportes del modo que él quiere que te comportes. Consigue manipularte gradualmente para que te veas a ti misma de un modo diferente, destruyendo tu confianza en ti misma.
·         Impone una lógica cerrada en el que realmente no acepta datos nuevos, opiniones, o críticas. En otras palabras, lo que él dice, es, y punto.
 Características Comunes De Los Abusadores
·         Posiblemente fue abusado en su niñez, o lo ha presenciado en su familia.
·         Tiene un temperamento explosivo que se activa con pequeñas frustraciones o argumentos.
·         Son extremadamente posesivos y envidiosos. Poseen un deseo intenso de controlar a sus parejas.
·         Su sentimiento de masculinidad depende de la dependencia de la mujer sobre él. Sólo se siente hombre si su pareja es completamente sumisa y dependiente de él.
·         Tienen relaciones superficiales con los demás. Su relación principal, si no exclusiva, es con su pareja.
·         Tienen baja autoestima.
·         Tiene expectativas inamovibles acerca de las relaciones de pareja y no tolerará menos. Espera de ella que se comporte de acuerdo con sus expectativas o su idea de cómo una esposa debiera ser, en ocasiones como fue por parte de sus padres, o justo lo contrario. Exige que ella cambie para acomodarse a sus expectativas.
·         Tiene una gran capacidad para creerse sus propias mentiras.Proyecta toda la culpabilidad de su relación sobre su pareja: No se hubiera emborrachado si ella no le molestara tanto. No se enfadaría si ella hiciese lo que se espera de ella. Si algo sale mal es por ella, que seguramente lo provocó intencionalmente y planea contra él. Nunca aceptará asesoramiento pues el problema no tiene nada que ver con él. O puede que acepte asesoramiento pero a la hora de la verdad la evita y pone excusas para no recibirlo. Tampoco quiere que ella reciba asesoramiento porque según su razonamiento su problema se solucionaría si se volviese a él.
·         Puede ser descrita como una persona que tiene doble personalidad. O es encantador o extremadamente cruel. Es o muy egoísta o muy generoso, dependiendo de su estado de ánimo o de quién esté presente.
·         Una de las mayores características de los abusadores es su gran capacidad para engañar a otros. Puede aparentar ser una persona calmada, encantadora, y muy educada. De ahí que muchas veces cuenta incluso con el apoyo de la familia de la víctima.
**Traducido y adaptado de “Symptoms of Emotional Abuse”, Lorelei Smith (*)

El abuso psicológico / emocional
¿Qué es el abuso psicológico emocional? ¿Con qué frecuencia ocurre? ¿Cómo identificarlo? ¿Cómo enfrentarlo? ¿Cómo saber si necesito ayuda?
Lo primero que suele saltar a la mente cuando pensamos en el maltrato a la mujer es en el maltrato físico, pero existe otro maltrato que muchas mujeres podemos llegar a experimentar, el maltrato psicológico y/o emocional. En este artículo aprenderemos a identificar este tipo de maltrato.
¿Qué es el abuso psicológico/emocional?
El abuso psicológico o emocional involucra cualquier comportamiento, verbal o no verbal, que impacta negativamente sobre el bienestar emotivo o psicológico de otra persona.
¿Con qué frecuencia ocurre?
Se dan casos de abuso psicológico/emocional en matrimonios, parejas íntimas, padres e hijos, hacia los ancianos, y por lo general, donde exista una diferencia de poder.
¿Cómo puedo identificar si me está ocurriendo a mí?
La persona que abusa de ti puede:
·         Ignorar frecuentemente tus sentimientos.
·         Te ridiculiza en lo que más valoras, como en tus creencias, sexo, sexualidad, habilidades, edad, apariencias, u orientación sexual.
·         Te ridiculiza o insulta por tu religión, raza, familia, clase social, o idioma.
·         Se abstiene de aprobar lo que haces, mostrar aprecio, o afecto.
·         Constantemente te critica, te insulta, y te grita.
·         Te humilla en privado o en público.
·         Se niega a socializar contigo.
·         No te permite trabajar, controla el dinero, y toma todas las decisiones.
·         Intenta evitar que veas o hables con familiares y amistades.
·         Frecuentemente te amenaza con marchar o te dice que te marches.
·         Te manipula con mentiras y contradicciones.
·         Se comporta de manera amenazadora.
·         Utiliza expresiones faciales y/o posturas corporales para intimidarte.
·         Te acusa de infidelidad.
·         Utiliza un lenguaje repleto de referencias sexuales.
·         Abusa verbalmente de los niños o mascotas del hogar.
Como respuesta a esto, puedes sentirte:
·         Inservible.
·         Dependiente del abusador.
·         Confundida.
·         Triste.
·         Enfadada.
·         Aislada.
·         Sin control de tu propia vida.

¿Cuáles pueden ser algunas de las causas?
Una persona puede abusar de otra para reclamar control. Es posible que ellos mismos se sientan enfadados e impotentes por lo que su cólera es redirigido a alguien cercano o con menor poder sobre ellos, así como sobre miembros familiares. En ocasiones fueron abusados en la niñez, aunque no siempre por ello se convierten en abusadores. También puede ser el resultado de roles tradicionales varón-hembra, donde las mujeres son percibidas como propiedades y primeramente deben obedecer a sus padres, y más adelante a sus parejas. Si también hay abuso físico o sexual, entonces el abuso emocional obligatoriamente también hay abuso emocional. En algunos países el abuso psicológico/emocional puede ser considerado como un crimen de violencia.
¿Qué puedo esperar?
El abuso emocional/psicológico tiende a mantenerse constantemente y suele ser difícil para la víctima percatarse y creer lo que le está sucediendo.
¿Cómo puedo enfrentarme a ello?
·         Si no estás segura de estar siendo abusada, háblalo con amigos o familiares que consideres que son de ayuda emocional y de quien confíes plenamente.
·         Recuerda que como muy posiblemente te sientes dependiente del abusador, puede que te incomoden y tiendas a perder confianza en las personas que intentan ayudarte.
·         Recuérdate a ti misma que tienes derecho a una vida libre de abuso.
·         Intenta darte mensajes positivos, que te den fuerza, como por ejemplo “soy una buena persona, y merezco ser tratada como tal”.
·         Participa en actividades de las que puedas disfrutar, que te animen y fortalezcan.
·         Pregúntate a ti misma qué le dirías a una amiga que pasase por la misma situación.
·         Si dependes de la economía de tu abusador, intenta conseguir un trabajo. Puede que incluso debas considerar crear una cuenta bancaria por separado y ahorrar dinero por si el abuso crece de más.
·         Siempre ten preparado números de teléfono y dinero ahorrado por si debes marchar repentinamente.
·         ¿Cómo saber si necesito ayuda?
Puedes necesitar ayuda si:
·         Dudas de tu propio juicio o te preguntas si estás loca.
·         Tienes miedo de tu pareja y expresas tus opiniones con menor frecuencia, y menor libertad.
·         Tienes miedo de los demás, y tiendes a verlos con menor frecuencia.
·         Te tomas tu tiempo para evaluar cuidadosamente los estados de ánimo de tu pareja antes de tratar un tema.
·         Tienes que tener mucho cuidado cuando estás con otra gente, y tiendes a estar hipervigilante durante su presencia.
·         Pides permiso para gastar dinero, tomar clases, o para salir con amigos.
·         Has perdido confianza en tus habilidades, te vuelves depresiva, te sientes atrapada e impotente.
·         Descubres que tus hijos están siendo negativamente afectados por el abuso. Por ejemplo, se aislan, vuelven agresivos, tienen pesadillas, o les va mal en el colegio.
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·          
·         **Artículo traducido y adaptado de The Counselling and Learning Skills Service, Emotional/Psychological Abuse [* ]